domingo, 26 de enero de 2014

[HOMIN] I miss you… now.

Pareja: Homin (YunhoxChangmin)
Tipo: Yaoi.
Autor: Jaesshi
Género: Romance, Angst.
Clasificación: {G} para todo el público.
Descripción: Existen tantas razones por las que dos personas pueden separase, rencor, celos, o algo tan simple como el amor y es mucho más triste cuando ellos llevan juntos por más de 5 años.
Yunho y Changmin son buenos amigos, pero el líder tiene una razón muy poderosa para cambiar de hogar, solo espera que haya sido una buena decisión.



I miss you… now.


Era una mañana como cualquiera, pero una muy ocupada para el joven que actualmente ordenaba sus cosas guardándolas una a una dentro de cajas mientras que su acompañante lo miraba desde una de las esquinas de la habitación, los envolvía un silencio sepulcral que solo era sustituido por los sonidos de fricción de las cosas contra las cajas y de las respiraciones de los dos, pasaban los minutos y el ambiente era cada vez más pesado, lo pudieron notar fácilmente, ya no era común tener ese tipo de silencios entre los dos desde hace 2 años.


Unos ojos seguían cada movimiento que hacia la otra persona, como si trataran de guardar cada facción de su rostro o movimiento que este hiciese, se había acostumbrado tanto a estos que temía olvidarlos al no poder verlos normalmente como cada día, su mirada lo delataba, sus dudas aun revoloteaban en su cabeza y desde que se enteró que tenía que haber un cambio en su vida no podía sacarlas de su cabeza.


En la cabeza de Changmin solo existían interrogantes, no podía pensar en nada más que ¿Por qué...? Los recuerdos aparecían en su mente, personas que se iban para nunca más volver, el temor, el llanto y la desesperanza, volvió a sentir todo y que ahora nunca se curaría, que la única persona que logro sanar todas las cicatrices se alejaba de su lado; lenta y dolorosamente las heridas se abrían una a una silenciosamente.


Para Yunho la situación no era diferente, sentimientos peleaban en su interior, sentimientos que nacieron por razones equivocadas, sentir el calor y la protección de Changmin, le hizo sentir algo que ante los ojos de la sociedad no está bien visto, eran sentimientos no podía evitar y que peleaban sin parar contra la razón que le daba su mente, el trató de soportar todo por un largo tiempo pero finalmente gano el corazón, y pensar en no ser correspondido por el pequeño le dolería mucho más que no verlo todos los días, tuvo que aceptar que la única alternativa que tenía para ser feliz y no herirse más era marcharse, sabiendo que reabriría viejas heridas en el corazón del maknae, pero tenía que hacerlo o no respondería por lo que pudiera pasar si el amor le ganara a la razón.


Lentamente, como si quisiera que el tiempo se detenga, cogió sus maletas, siendo ayudado por el menor quien sufría por cargar las cajas más pesadas, avanzaron hacia la puerta, a Changmin se le formaba un nudo es su garganta cuando vio todas los regalos que le había dado a Yunho el día de su cumpleaños, en una de las cajas, recordó tantas cosas, tantas peleas, donde le había gritado en la cara a Yunho que se vaya del departamento, que no quería verlo más, ahora le dolía horriblemente pensar que ya no lo veria cada mañana pasar en frente de su cuarto para dirigirse al baño y saludarlo con un "Buenos Días" ,con una sonrisa que no la muestra a nadie más que a él, estaban por entrar al ascensor y el más alto se sentía cada vez más inquieto, el nudo de su garganta era cada vez más grande y le fue imposible aguantar toda esa carga emocional, finalmente entraron al ascensor y se volteó con la intensión de no ser visto con el líder, dejando fluir cada emoción dentro de su interior y pequeñas lagrimas empezaron recorrer sus mejillas lentamente, de ninguna manera dejaría que Yunho lo volviera ver en ese estado, de pronto sintió una mano en su cabeza, era cálida y reconfortante, sabia a quien pertenecía y le hizo sentir en paz, le había hecho tanto bien sentir tu tacto que su cuerpo pedía más, quería abrazarlo, y decidió voltear, pero cuando estaba decidido a hacerlo la puerta del ascensor se abrió dejándolo con unas ansias y una rabia infinita, maldijo su suerte, el destino siempre había estado en contra suyo, ¿porque cuando más motivado estaba todo se iba por el caño? 


Volvió a coger las cajas y siguió a Yunho que se había adelantado un poco, vio su figura varonil, siempre había sido alguien que elige buena ropa, y la ropa siempre se “portaba bien con él”, cada cosa que se ponía se le ceñía al cuerpo perfectamente, pronto vio la cabeza de Yunho voltear y mirarle directamente a los ojos, vio una sonrisa dibujársele en su rostro haciéndolo estremecer y sonrojar, Changmin solo pudo voltear la mirada, esas cosas siempre causaba sensaciones raras en el corazón de Min, no podía negar que le gustaba, sabía que extrañaría eso más que cualquier otra cosa, el tiempo corría en su contra y el triste final poco a poco se acercaba, lo que más lamento fue no poder comentar nada al respecto, su relación nunca se había basado en palabras vacías, sentimientos flotaban en medio de los dos cuando estaban juntos, permitía que ello se comprendieran sin ninguna dificultad, sonrisas, miradas, toques y de muchas otras cosas constaban sus días, pero Changmin sentía que lo iba a perder y que tal vez unas cuanta palabras lo mantendrían a su lado, palabras que nunca saldrían de sus labios. Están ya a lado del vehículo esperando ser abierto, pusieron todas las cosas finalmente adentro de carro, cerraron el capote y se miraron por ultima vez.


Yunho no podía pensar mucho, su cabeza seguía metida en muchas otras cosas, especialmente en las reacciones del menor en las últimos minutos transcurridos, le daba una pequeña esperanza que Changmin lo extrañaría como él lo haría, le cogió el hombro y le acaricio lentamente, era lo mínimo que podía hacer.


- Min, nos volveremos a ver.


Sus ojos se encontraron nuevamente, e inmediatamente recibió un abrazo del menor, sus brazos lo aferraban fuertemente a su cuerpo, Yunho sentía que el aire se escapaba de sus pulmones pero no le importo, por nada del mundo desharía el agarre, estuvieron largos minutos así hasta que Changmin sintió sus brazos adormecerse, soltando lentamente su cuerpo, un pequeño hundimiento en la casaca de cuero del mayor fue notable ante los ojos del mejor, se miraron unos segundos tratando de descubrir algún deseo de retirar su decisión, encontrando un vacío profundo en los ojos del líder.


Yunho hizo una venia en símbolo de despedida seguido por el menor que miraba a su amigo irse en su auto, despidiéndose con la mano, Changmin sentía que había perdido las fuerzas para moverse y se abstuvo a sonreír, no quería llorar más.


El camino seria largo, tenía el tiempo suficiente para pensar cada cosa que tenía en su cabeza, ordenar ideas y olvidarse de unos cuantas cosas locas que rondaban desde hace unos días en su mente, se había metido tanto a la cabeza que era lo correcto que pronto pensó que posiblemente solo haya sido algún capricho suyo, o puede que realmente haya hecho lo correcto, cayó en cuenta de que pensar lo confundía más, trato de poner su mente en blanco, tal vez si se relajaba un poco podría pensar más claro, detuvo el auto por un momento, hecho la cabeza para atrás, se le había hecho costumbre, sin pensarlo espero con ansias las manos agiles del menor, acariciando y dando masajes a sus hombros tensados por el trabajo después de un día largo, nunca llegarían, pero realmente las quería, eran reconfortante, y sabía que iba a extrañar, no hace mucho que fue la última vez que lo hicieron pero paso algo que no debió pasar y que hizo cambiar drásticamente la actitud que tomaba Changmin con Yunho, cerro recordando ese día, esbozó una sonrisa, se sonrojo levemente y mordió su labio.


[FLASHBACK]


Ese día su agenda estaba algo ajustada, después de ensayar, tenían una entrevista y el manager les había dicho que tenían una hora para lo que quisieran, Yunho fue el primero en pedir la ducha y Changmin no se preocupó por que sabía que su hyung se bañaba rápidamente y el en cambio decidió buscar comida.


Cuando Changmin regreso encontró a Yunho ya cambiado, estaba hablando por teléfono con alguien, quedamente Changmin se acercó a la cocina para traer dos platos, sirvió los sándwich encima de la pequeña mesa, sirvió jugo para acompañar y se sentó a esperar a que el líder termine de hablar, no paso mucho cuando Yunho bajo el celular de su oído y lo guardo en el bolsillo delantero, volteo y vio en la mesa un pequeño break con un Changmin sonriente esperándolo.


-Sensei, tome asiento por favor que me muero de hambre - le dijo Min sarcásticamente, haciéndole una seña con la mano para que se sentara.


-Oh! lo siento - rápidamente Yunho tomo su lugar y cogió una parte del sándwich, ya cortado por la mitad, para saborearlo, mordiendo un gran trozo de esta, mastico rápidamente y trago casi atragantándose, cogió su vaso y tomo un trago para que la comida pase.


-Gracias Min, no sabes cómo mi estómago pedía por comida.


Changmin no pudo decir nada, la forma en la que comió Yunho le causo gracia, riendo fuertemente, estaba feliz de que a su amigo le haya caído como anillo al dedo, y tranquilamente disfrutaron de su comida. Changmin cogió los platos para ponerlos a lavar y regreso a la mesa, vio a un Yunho moviendo su cabeza en círculos, el estrés y la presión del trabajo rara vez lo ponían así, especialmente cuando se le hacía difícil lidiar con la situación, se acercó a él y puso sus manos en sus hombros y recordó los masajes que le enseñaron en ese programa japonés e intento hacerlos dando pequeños círculos en la zona.


-arhgg... - Yunho gruño, el maknae pensó que le gustaba y continuo - duele...


Y saco las manos inmediatamente, siendo sujetadas rápidamente por el mayor, los ojos de Yunho se abrieron y miraron a Changmin con una mirada neutra, el más joven miraba las facciones del líder revisando una a una, sus ojos que escondían una sensualidad exótica, una hermosa nariz masculina, su lunar que adornaba su cara de una manera especial, sus labios que le parecían perfectos, hermoso color y brillaban de una manera natural, para Changmin le parecían un caramelo o algún tipo de dulce extraño que se le antojo, podía hacerse una idea de cómo podía saber, fresas con azúcar, no, tal vez frambuesas con leche, hasta que se dio cuenta que la curiosidad había matado a un gato hoy, estaba besando los labios de su hyung y no sabía cómo se había acercado tanto, se separó rápidamente con sus ojos bien abiertos, con sus labios algo húmedos y su corazón latiendo a mil por hora, en iguales condiciones se encontraba la otra persona, se miraron por segundos cuando escucharon la puerta de su departamento abrirse y cerrarse, voltearon y el manager entraba hablando por teléfono, sus manos aun seguían juntas y se separaron justo a tiempo.


-¡Changmin! ¿Qué haces? NO ESTAS LISTO. - el maknae se miró y se dio cuenta de que estaba con la ropa del gym aun.
-Dame 10 minutos y estoy listo.
- Te doy 5 y los espero en el carro... RÁPIDO.


El pequeño se bañó como un rayo, salió a su cuarto para buscar su ropa y vio que ya estaba elegida y preparada encima de su cama, sabía que había sido Yunho, se cambió y salió corriendo del departamento, Yunho ya estaba en el auto y le abrió la puerta a Min para que pueda entrar rápidamente, su cabello aún estaba mojado, trato de recobrar el aliento cuando sintió que algo le tapaba la cara, lo cogió y miro, era una toalla, volvió sus ojos hacia ese amigo - hermano, lo admiraba tanto, era muy bueno con él a pesar de todas las cosas y las peleas, Yunho siempre estaba allí, y cada muestra de afecto que tenía para/con él lo hacían sentir bien, pero por primera se sintió incomodo, dudo de las intenciones que tenía y sintió miedo.


[FIN FLASHBACK]


Esa era una de las razones por las que se mudaba, desde ese día empezó a sentir cosas por ese pequeño niño que ahora era todo un hombre, y el solo hecho de verlo tan grande, tan maduro, tan el empezó a volverlo loco, se había puesto tan apuesto aunque siempre lo fue pero de alguna manera su belleza crecía cada día, sin contar que se había vuelto un chico muy sexy, decidió encender el motor del auto y dejar de pensar en tonterías , definitivamente todo esto lo ponía peor.


Un Changmin un poco confuso se encontraba parado aun en el estacionamiento, toda la fuerza de sus músculos se habían ido de su cuerpo, como si la persona que se acaba de marchar le había robado la voluntad, sus lágrimas descendían de nuevo, ¿qué pasaba con él?, ni el mismo lo sabía, un deseo merodeaba por su cabeza como un molesto mosquito "quiero estar a su lado", entendió que los buenos momentos y la agradable compañía de su amigo eran simple y llanamente la mejor, no existían silencios incomodos aunque eso no significase que no los hubiese habido, silencios llenos de significado que de alguna manera se habían vuelto solo de los dos, nadie entendería esto mejor que ellos mismos y por primera vez en la vida Changmin tuvo que admitir que necesitaba a Yunho, que lo quería a su lado, quería que esos buenos tiempos sigan como siempre, lloró como un niño, sabía que ese capricho no podría ser cumplido y decidió regresar a su departamento para descansar, cuando llego a su cuarto, sin cambiarse de ropa, se acostó, no era de noche y decidió solo dejar reposar a su cuerpo y a su mente, dormir siempre le hacía bien, dejo que sus ojos se cerraran, eso era lo que queria.


Lentamente los abrió y vio que había anochecido, sintió como si solo hubiera pestañado y los recuerdos recobraban control de su mente, de nuevo sus lágrimas volvían a brotar, no podía para de llorar, entendió que valoras mejor a las personas cuando no están a tu lado y se arrepintió desde el fondo de su corazón todas las veces que le había dicho a Yunho que se largara del departamento, tenía muchas ganas de estar a su lado y decirle que lo sentía, lloro con más fuerza, la impotencia lo volvía loco, de pronto su celular sonó, era un mensaje de Yunho, lo abrió y su corazón empezó latir fuertemente.


Hola Changmin, espero que estés bien, te escribo para decirte muchas cosas, que tal vez sean cursis pero las diré. Lo primero es que te admiró demasiado, sé que aunque estemos lejos eres fuerte y que ya no eres un niño, me sorprende la rapidez con la que has crecido, y te has hecho mucho más fuerte que yo, me ayudaste a salir de esa crisis en el momento de nuestra separación, solo tú sabes cuál fue mi estado de esos días, y no me siento orgulloso de las cosas que hice, gracias por los buenos y malos momentos, te pude conocer mejor y aprendí a quererte y a valorarte, solo me queda decir una cosa más…  que te voy a extrañar... y mucho. Nos vemos pronto, adiós.


El corazón de Changmin latía con desesperación, haber escuchado, aunque sea un poco de las palabras de su amigo, lo relajo, eso era lo que necesitaba, dejo de llorar, sonrió y decidió responderle.


Yunho… te extraño ahora mismo.


Fue lo único que escribió, una frase que guardaba sentimientos ocultos, que no tuvo el valor de decirlo cuando lo tenía enfrente, pero gracias a las palabras de su amigo pudo el también confesar eso que guardaba con recelo en su corazón, finalmente el enorme peso que sentía que llevaba fue liberado y las consecuencias de haber tenido un día lleno de emociones le estaban cobrando la cuenta, empezó a sentirse muy cansado pero nadie le quitaba esa sonrisa del rostro, sabía que esa noche dormiría tranquilo, y esperaba con ansias el día siguiente, quería encontrarse de nuevo con su compañero de grupo, le urgía verlo, lo necesitaba, segundos antes de dormir, en su cabeza escucho una voz que decía “lo amas”, lo sabía y no podía hacer nada al respecto, sin poder evitar la pesadez se dejó caer en los brazos de Morfeo.


Una sonrisa, limpia y llena de tranquilidad se dibujaba en el rostro del líder.


-Así que me extrañas ¿ah? ¿No se supone que yo soy el de las cursilerías?


Rió quedamente y luego volvió a mirar el cielo, desde que llego a su departamento nuevo, se había acercado al balcón y no se había movido de allí en todo el día, los deseos de regresar le estaban jugando una mala pasada y sabía que si su cuerpo se movía solo un milímetro iba a ser controlado completamente por el deseo, eso no sería nada bueno.


La noche y las estrellas le hacían recordar a Changmin, los dos tenían brillo propio y único, cuando más oscura y terrible era la situación llegaba él con su brillo e iluminaba la vida de Yunho, cuando estaba en el escenario, cuando actuaba o cualquier cosa que hiciera, brillaba, era hermoso verlo así, Yunho sabia dentro de su corazón que amaba a Changmin, pero no era lo correcto, la hermosa relación de amistad que habían forjado con sudor y lágrimas se derrumbarían por solo 2 palabras, que se moría por pronunciar, pero se las guardaba en lo más profundo de su alma. 


Aún seguía confuso, trataba de hacerse el fuerte diciéndole todas esas cosas al maknae pero él era el más confundido, él se mudó más que todo por el grupo, porque si fuera por él se hubiera quedado y no solo eso Changmin ya se hubiera enterado de sus sentimientos. 


El también esperaba con ansias el día siguiente para poderlo ver, contaba cada minuto y cada segundo que pasaban, pero la espera de la noche seria larga, así que decidió descansar, se preparó para dormir y se acostó, estaba feliz de poder estar a su lado aunque sea de esa forma, podía verlo sonreír y más que todo apoyarlo como lo había hecho siempre, no podía vivir sin poder verlo una sola vez, y poder estar a su lado aunque sea por el trabajo, lo mantendría con vida, pero Yunho sabía que tarde o temprano la verdad saldría a la luz.


FIN

jueves, 16 de enero de 2014

[HOMIN] Una carta I.

Pareja: Homin (YunhoxChangmin)
Tipo: Yaoi.
Autor: Jaesshi
Género: Romance, Angst.
Clasificación: {G} para todo el público.
Descripción: Sentimientos escondidos, son liberados en una carta, con la intención de que la persona amada los lea a tiempo.


Una carta.

Para Yunho:

Tengo que decir la verdad, no sé cómo empezar esta carta, la mejor forma hasta ahora es hablarte como lo hago siempre, tal vez se me haga más fácil poder expresarte mis sentimientos.

Primero decirte que cuando te conocí, no me dejarás mentir, te odie, tan arrogante, y pensé “hombres como tú, no luchan por lo que quieren”, equivocándome terriblemente, vi en ti la perseverancia y la fuerza de un hombre que lucha y que guarda sufrimientos, desde ese día, de alguna manera, me propuse ser como tú.

Aun me acuerdo el día que no pude esconder mis sentimientos y llore enfrente de muchos televidentes, tú me miraste como nadie lo había hecho y evitaste reírte, al contrario, me abrasaste y compartiste mi dolor contigo, esos fuertes brazos que calmaban mis penas, me sentí querido después de mucho tiempo, gracias por quererme.

Cuando pude descubrir más de ti me di cuenta que era tarde para no amarte, llegue no solo a quererte, te amé, miento, te amo aun, con todas las fuerzas de mi alma, y ese es el propósito de esta carta declararme a ti, debería terminarla, pero no lo haré, necesito contarte todo lo que siento, necesito decirte todo, necesito.

Todo este tiempo junto a significado mucho para mí, aunque no lo haya podido expresar, por que como vez soy un cobarde que se declara por una carta, y que no puede mirarte a la cara porque siento que me volvería loco con solo hacerlo.

Me tienes esclavo de tus labios, de tus ojos, de tu cabello, de su sonrisa, de tu voz, de tu cuerpo, de tu ser, saber que nadie me comprende mejor que tú, saber que te quedaras a mi lado por siempre aunque nunca sea como lo desee, discutir como perros y gatos y volver a reconciliarnos como si no hubiera pasado nada, de acordarnos cosas pasadas y llorar o reír juntos en la privacidad de nuestro departamento, conocerte ha sido una de las experiencias más interesantes de mi vida.

Eres único, cada cosa que haces me sorprende y me recuerdo constantemente lo poco que aun te conozco, vi como luchabas con cada gota de sangre que tenías para que estuviéramos juntos, pero también te vi caer por la depresión, sé que eres un hombre fuerte y verte en ese estado fue lo más triste que pude presenciar tuve, a pesar que yo también sufría, ponerme fuerte y mostrarte mi lada más cruel.

Te pido perdón por no haberte dicho lo que siento, o cuando te hacia mucho daño pedirte perdón, por no escucharte cuando a veces lo necesitabas, y abrazarte cuando más lo necesitabas, fui muy egoísta y esa es otra de las razones de las que creo que no soy alguien para ti, alguien más entrará en ese corazón cálido para poder hacerte feliz para siempre.

Gracias hermano, por estar a mi lado cuando más lo necesité, ese momento de la separación me mostraste una persona nueva cuando te recuperaste y eso me hizo sobreponerme, verte fuerte frente a mí, aún tengo que cumplir la promesa que me hice hace tiempo “ser como tú”.

Tengo mucha pena, saber que no te volveré a ver por qué no renové el contrato como tú, eso es definitivamente una separación, me duele y mucho no poder ensayar juntos de nuevo, aparecen en los programas para hacer el tonto, presentarnos en concierto, porque no podremos disfrutar de la compañía del otro, me duele no volverte a ver, me duele mucho.

El propósito final de esta carta es que si tú también sientes lo mismo que yo, me busques, porque yo siempre te estaré esperando por ti, aunque elijas a otra persona, te esperaré, cuando quieras ser escuchado, estaré allí y cuando necesites amor, yo te amaré por siempre.
Recuérdalo.


Changmin.

miércoles, 15 de enero de 2014

Bienvenidos lectores empedernidos.



Les doy la bienvenida a todas las hermosas personas que son amantes de leer fanfics yaoi, un arte extrañamente interesante, que solo la gente con clase conoce y aprecia, si creen que estoy alagando mucho, pues siéntanse dichosas porque así lo creo.

La idea principal de este blog es poder expresar mi amor, extraño pero, de alguna manera, único por el yaoi, mostrarles lo que veo, lo que siento, lo que opino y lo que creo, porque el mundo del yaoi es tan grande, que ni yo logro entenderlo todo, aclaro que no soy una experta, y finalmente plasmarlo en escritos.

Tal vez me juzguen mucho, porque para mí este puede ser un intento fallido de dar a conocer lo que pienso, cosa natural de un ser humano el querer comunicar cada cosa tonta que se le pasa por la cabeza, pero otra intención que tengo es de entretener sus mentes con algo de lectura de la buena, de lograr algún tipo de clic en sus cerebros, de hacerle sentir enamorados, de alegrarles un día, de aclarar sus ideas, de hacerles llorar, enojarse, sentir, etc.

Un deseo personal es, que mi trabajo les agrade a todos mis lector, y llegar a recibir una respuesta acerca de sus opiniones, me sentiría satisfecha con mi trabajo.

Agradezco de antemano por las personas que entran a mi blog, espero poder causar lindas emociones en ustedes.

Sin más que decir... diviértanse.

Jéssica